La historia del parquet

Puede parecer que la historia del parquet es muy reciente, ya que su popularidad y uso como pavimento para el suelo de múltiples superficies, ha tomado forma en los últimos tiempos. Pero, lo cierto es que para conocer la historia del parquet debemos remontarnos a miles de años atrás, a los orígenes del uso de la madera por parte de las primeras civilizaciones, que ya la utilizaban.
La madera en las primeras civilizaciones
Antiguamente, cerca de 3.000 años antes de Cristo, la madera era un material que se colocaba en el suelo para protegerse de la humedad y del frío que éste desprendía. Después, fue adquiriendo protagonismo y egipcios, griegos o vikingos la usaron en la construcción completa de barcos, viviendas y templos.
Fue, concretamente, en la Edad Media cuando el parquet, como lo podemos identificar hoy, nace. Era habitual encontrarlo en los suelos de castillos y casas de clases adineradas donde cada vez tomó más presencia y fue mejorando la elaboración de los mismos, con maderas procedentes de árboles de todo tipo: roble, haya, castaño, fresno, cerezo…
El nacimiento del parquet
Durante el Renacimiento, la influencia del uso de madera en estos espacios de renombre fue creciendo. Ejemplos de ello son, principalmente en Francia, el castillo Vaux-le-Vicomte, el Palacio de Versalles o el castillo de Chantilly, los mosaicos de los cuales han devenido modelo de referencia e, incluso, todavía hoy toman el nombre histórico. Términos como “parquet Versalles”, “parquet en mosaico” y “parquet Chantilly”, que recuerdan a las formas de estos suelos.
En los siglos XVII y XVIII su prorrogado éxito abrió las puertas a nuevas maneras de seguir innovando en suelos y se incluyó la incorporación de otros materiales como el nácar o el marfil, que reafirmaban la intención de trabajar en embellecer los suelos y darles un toque que los distinguiera.
Poco a poco, el parquet fue siendo más asequible. Su auge imparable permitió que aparecieran formatos más sencillos, que sirvieron para que otras clases sociales pudieran disfrutar de éste en sus hogares.
El parquet en nuestros días
Llegados a una actualidad más reciente, el siglo XX marcó, sin duda, un antes y un después en la historia del parquet. Primero, porque la accesibilidad a este material y a todas sus posibilidades fue aumentando. Y segunda, porque la industrialización y la estandarización de los procesos, los tamaños y los formatos dio nuevas oportunidades de negocio y amplió el foco de posibles clientes dispuestos a instalar en su espacio parquet.
Durante la segunda mitad del siglo XX aparecen los suelos laminados y el parquet se especializa todavía más, dando pie a los distintos tipos que conocemos hoy. Una especialización que surge, también, de nuevas necesidades y retos para afrontar exigencias de durabilidad, resistencia, etc.
Actualmente el parquet, ya sabemos, ha tomado una notoria presencia y la madera en pavimentos es una apuesta segura, sostenible y de futuro, con grandes posibilidades tanto en diseño como en decoración, por las múltiples ventajas de las que goza y todo lo que tiene por ofrecer.