Parquet encolado vs. parquet flotante

Os damos la bienvenida a nuestro blog de Top Parquet un año más. ¡Feliz 2022! Gracias por seguir a nuestro lado y esperamos continuar hablando de lo que más nos apasiona -el parquet y todos sus entresijos- en los próximos meses, de este nuevo capítulo de nuestras vidas.
Hoy, para arrancar, un post en el que vamos a enfrentar dos de los tipos de parquets más populares. En realidad, no sería exactamente un enfrentamiento directo entre dos tipologías, ya que el concepto de parquet flotante, como tal, no existe. El parquet flotante no es un tipo de parquet, sino un sistema de instalación. Normalmente coincide que los parquets multicapa se colocan de este modo, es decir, “flotando”, no encolados al subsuelo. Por esta razón, al corrresponderse este formato de parquet con dicha instalación, ha devenido popular tomar el concepto del sistema para llamarles parquet flotante.
Parquet flotante
Más allá de la aclaración anteriormente descrita, vamos a conocer primero un poco más sobre el parquet flotante, para sacar a relucir sus secretos y así poder diferenciarlo, después, con el parquet encolado.
Estos parquets (hay varios tipos, recordemos que el nombre les viene del sistema que utilizan las tablas de madera para unirse), como su nombre indica, no van encolados al suelo. El sistema está formado por un juego de encajes en los laterales -y testas- llamados machihembrado que, mediante cola o, los más modernos, a través de un sistema mecánico de click -o lock-; une las tablas entre sí, de modo que quedan encajadas sin ir sujetas al suelo. Entre el parquet y éste, que ejercería de base, se extiende, no obstante, una especie de subsuelo, normalmente de polietileno y espuma, cuya función es aislar la madera de posibles humedades, corregir las posibles imperfecciones del suelo (niveles, agujeros, malformaciones…) y/o eliminar los ruidos que, de lo contrario, surgirían al pisarla.
Las ventajas del parquet flotante son muchas, por eso el sistema es el más popular y los parquets que se ajustan a él son los más instalados:
- Rápida instalación (lo que implica, por consiguiente, un precio relativamente más económico).
- Se puede instalar aún estando la vivienda habitada.
- Mayor adaptación (de la instalación sobre suelos que no permitan las garantías de un suelo encolado).
- Mayor precisión y variedad de acabados (al venir barnizados de fábrica).
Contrariamente a todos estos puntos a su favor, debemos decir que su vida útil está más limitada, ya que la capa noble es de un grosor inferior a la que ofrecen parquets macizos como la tarima o el lamparquet.
Parquet encolado
El parquet encolado, o pegado, corresponde a cualquier formato de parquet, macizo o multicapa, que está directamente pegado al suelo. Este sistema de instalación, consecuentemente, exige ciertos requisitos con la base -el suelo del espacio- cuanto a nivelación, humedad, limpieza e higiene, o cualquier impedimento que pueda afectar a la correcta adhesión del parquet en él. Además, al revés de lo que sucede con el parquet flotante, su instalación exige mayor trabajo y un tiempo de inhabilitación, pues no se debe pisar el suelo recién colocado. Por lo que respecta a sus puntos fuertes, podemos decir que:
- Elimina totalmente el ruido de la pisada.
- Minimiza las dilataciones del parquet.
- Aporta mayor firmeza al suelo.
- Permite ser instalado sobre calefacción radiante, a la que mejora su eficiencia.