Eliminar las rayadas del suelo del parquet

Cada vez son más las viviendas, y espacios en general, que disfrutan de la instalación de un suelo de parquet, gracias a la gran cantidad de ventajas que otorgan sus características. No obstante, también cabe recordar que es uno de los suelos que más cuesta mantener en perfecto estado, aunque su durabilidad -día a día- es mayor. Accidentes y despistes cotidianos pueden amenazar la estabilidad de éstos provocando la marca más temida: la rayada. Es por ello que hoy, en esta nueva entrada en nuestro blog, Top Parquet, queremos hablaros sobre cómo podemos acabar con éstas y seguir luciendo un reluciente y bien cuidado suelo de parquet.
El tipo de rayada, cuenta
Aunque seamos muy precavidos y vigilemos con el suelo de nuestra casa, gestos tan sencillos como mover una silla, la tenencia de mascotas, un objeto pesado o punzante que cae sin querer… pueden causar daños “irreparables” en nuestro parquet. Cuando esto ocurre podemos tener suerte y percatarnos de que no ha ocurrido nada o, como suele ser más común, percibir que tenemos una rayada. No es del gusto de nadie ofrecer un parquet lleno de éstas y, sobre todo, la primera, es la más molesta de todas.
Teniendo en cuenta que cada rayada es diferente y que, según el impacto, puede tener una profundidad y dimensiones distintas; debemos saber eliminar cada una de ellas en base a esos criterios. Por eso, a continuación, os ofrecemos algunos de los mejores consejos para tratar de eliminar, o como poco disimular, estos desperfectos inevitables tan inoportunos.
- Rayada superficial: las menos importantes de todas y más salvables. Si nos encontramos ante una rayada superficial en nuestro suelo de parquet, preparando una solución a base de ¾ de aceite mezclado con ¼ de vinagre, podemos remediarlo. Debemos aplicar la mezcla con un paño humedecido sobre el parquet y dejarla actuar durante unos minutos. En parquet de roble, nogal o caoba podemos utilizar, también, yodo.
- Rayada media: cuando la situación se complica y ya velar por la integridad de nuestro suelo no es tan fácil y debemos tener más cuidado para intentar resolver este tipo de daños. El truco, en este caso, está en aplicar por toda la marca lejía de agua o ultrafina. Después debéis emplear un poco de barniz -o cera- para devolverle el brillo al parquet.
- Rayada profunda: siempre es aconsejable que ante este tipo de rayadas os pongáis en contacto con profesionales que, realmente, analicen la situación y os den su opinión al respecto, pero si queréis mediar vosotros mismos, para eliminar este tipo de daños lo primero que debemos hacer es frotar, con sumo cuidado, la superficie dañada con papel de lija, realizando movimientos circulares. Cuando percibamos que ésta está desapareciendo, debemos aplicar masilla para madera, siempre del mismo color del suelo, y aplicarla completamente en la hendidura. Volvemos a pasar la lija para dejar la superficie lisa y eliminar el exceso de masilla sin que queden irregularidades. Finalmente, aplicamos el barniz o laca correspondiente para conseguir el acabado perfecto.
Como veis, no hay problema a la hora de intentar arreglar estos desperfectos que, ocasionalmente, nos causan molestia. De todos modos, recordar una vez más que es fundamental, en caso de no estar seguro, asesoraros pertinentemente y garantizar la integridad de nuestro parquet antes de querer arreglarlo por nuestra cuenta y agravar el problema provocando un estropicio mayor.